La vida no es como el teatro, que puedes ensayar, hasta que te salga bien . Tienes que arriesgarte. Y cuando lo consigas , no esperes que te aplaudan y se baje el telón.

lunes, 27 de mayo de 2013

Fly away

¿Alguna vez te has puesto a observar a un pájaro? 
como despliega y junta sus alas a su cuerpo en variaciones 
repetidas, yendo la mayoría de veces en grupos, o a veces solos. 
Hay veces en que me quedo pegada a la ventana admirando
a estas hermosas aves ... , las veo y veo como son libres,
como quizás disfrutan el volar, el ir en contra del viento,
subiendo y bajando o de vez en cuando dando uno que otro giro. 
Me encantaría saber que siente un ave al volar, me encantaría ser 
un ave para de una vez por todas sentirme al fin libre y volar, volar lejos.   






Las verdades del corazón ...


Un día te habla, el otro te ignora. El otro pasa de tí y el otro tontea contigo. Que verdad más grande.
Encima lo intentas, intentas olvidarte de él, pero ¿para qué engañarte? Si sabes que ni aunque te dijera la peor de las barbaridades lo conseguirías. Porque cada vez que estás apunto de conseguirlo, cada vez que piensas que él ha dejado de ser tan importante para tí, que ya no es en lo único en lo que piensas a cada momento, llega él y en cuestión de segundos, con una sonrisa o con un simple te quiero es capaz de reducir a cenizas aquella enorme fortaleza que tantos días de sufrimiento y dolor habías construido para huir de él.
Y quizás para él ese te quiero no signifique nada, sea uno de los miles que dice a diario, pero para tí es como un tesoro que guardarías en una cajita de terciopelo si pudieras, para conservarlo por siempre.
Te paras a pensar que alomejor no merezca la pena, que más que feliz te haga desdichaza y que cada sonrisa que él te saca sea superada por el millón de lágrimas que derramas por su culpa, pero ¿qué más da eso? si cada vez que tu móvil suena y es él, cada vez que tienes un nuevo conectado y allí está su nombre, y su foto de perfil aparece en pequeñito al lado de la barra de tareas junto con un circulito verde que indica que te ha hablado eres feliz, eres inmensamente feliz, y una sonrisa tonta, que digo tonta, y una sonrisa estúpida se dibuja permanentemente en tu cara, y el resto del día solo piensas en ese tiempo en el que has sido tan feliz como una niña pequeña cuando en carnaval se viste de princesita y ella realemnte cree que lo es, y aunque simplemente hayan sido unos pocos minutos los que él te haya dedicado, para tí son horas, milenios.

Y entonces te das cuenta de que él significa mucho más de lo que podrías llegar a imaginar y que...sencillamente le quieres más que a NADA.





sábado, 25 de mayo de 2013

Esas cosas

Recuerdas aquel tiempo, cuando las decisiones más importantes se tomaban con un práctico "pito, pito, gorgorito ? Cuando podías detener las cosas con un simple "¡Tiempo muerto, no vale, era trampa...!" Cuando los errores se arreglaban diciendo: "Empezamos otra vez". Cuando tener dinero sólo significaba poder comprarte una bolsa de chuches al salir del cole. Cuando hacer un castillo de arena podía mantenernos felices y entretenidos durante una larga tarde. Cuando para salvar a tus amigos bastaba con gritar "¡Por mí y por todos mis compañeros!" Cuando siempre descubrías tus más ocultas habilidades, a causa de un "A que no eres capaz de..." Cuando lo único que nos hacía correr como locos hasta que el corazón se nos salía del pecho, era un divertido "¡Tonto el último!" Cuando los globos de agua eran las más modernas, poderosas y eficaces armas que jamás habían inventado. Cuando la palabra GUERRA sólo significaba tirarse tizas y bolas de papel en los cambios de clase. Cuando la mayor desilusión era haber sido el último elegido en los equipos del cole. Cuando un helado era la mejor recompensa y quitarte las ruedas pequeñas de la bici significaba un gran paso en tu vida. Cuando el negocio del siglo era conseguir los cromos repetidos por los que hacía tanto tiempo que buscabas. Cuando sólo llorábamos desconsoladamente porque habíamos perdido nuestro tazo preferido. Cuando ponerte la bata a modo de capa te hacía soñar y subido en cualquier escalón deseabas con todas tus fuerzas poder volar como superman.
Todas esas simples cosas nos hacían felices, no necesitábamos nada más que un balón, una comba y un par de amigos con los que hacer el tonto durante todo el día...

Nunca pierdas el niño que llevas dentro.


...



Por cada beso con respiración contenida, por cada guitarra tocada al son del corazón del guitarrista, por cada noche con sol y sin luna, por cada copa con alcohol, por cada fiesta hasta la madrugada, por cada alegría, por cada tristeza, por cada noche larga, por cada noche corta y compartida, por cada sonrisa, por cada palabra de amor, por cada llanto, por cada enloquecido amor.